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72-Día de paga


General

Titulo original: Pay Day
Nacionalidad: Estados Unidos
Año de producción: 1922
Género: Comedia

Otras personas

Director: Charles Chaplin
Escritor: Charles Chaplin
Productor/Estudio: Charles Chaplin Productions; Associated First National Pictures
Compositor: No hay
Fotografia: Roland Totheroh

Funcionalidades

Duración: 22
Pistas de idioma: Muda
Idiomas de los subtítulos: Castellano
Modo de color: Blanco y negro
Fuente ripeo: Web
Soporte: x264
Tipo archivo: MKV
Calidad imagen: Excelente
Peso: 1,4 Gb

Reparto

  • Charles Chaplin
  • Edna Purviance
  • Mack Swain
  • Phyllis Allen
  • Sydney Chaplin

Sinopsis

Charlot trabaja de peón. Cuando llega tarde, le regala al capataz un lirio blanco para que le perdone, pero es tan lento en su trabajo que el capataz lo traslada a la sección de albañilería, donde trabaja tan deprisa que los compañeros no pueden seguirlo. Cuando la hija del capataz aparece, Charlot pierde la cabeza...

Comentarios

"Pay Day" es, definitivamente, una de las mejores comedias cortas de Chaplin y además viene que ni pintada para ver a los dos hermanastros, Syd y Charles, interactuando en muchas escenas, en las cuales Syd no se queda atrás como comediante consumado. Charles interpreta a un trabajador de la construcción que llega tarde al trabajo. La secuencia más divertida surge inmediatamente, con Charles cavando vigorosamente en la zanja para sacar sólo puñaditos de tierra.

Pero "Pay Day" no sólo es otra comedia de slapstick; también tiene uno de las mejores guiones de todos los cortometrajes de Chaplin. Sus desventuras en el trabajo preparan el escenario ideal para su paga insuficiente (que parece no serlo porque Charlie no tiene educación y suma: 2 + 2 + 2 + 2 = 9), y sus posteriores enfrentamientos con su bestial esposa. Cuando ella se queda con casi todo su sueldo, él se escabulle a un bar para emborracharse y finalmente llega a casa a las 5 de la madrugada, sólo para encontrar a su horrenda esposa durmiendo abrazada a un rodillo. Otro momento clásico es cuando se cuela en el baño (con la esperanza de haber convencido a su esposa de que ya se fue a trabajar) y salta dentro de la bañera llena de ropa... para descubrir que también está llena de agua.

Insistimos, sin embargo, en el aliciente de ver a Charlie y Syd, frente a frente (eran de la misma estatura), desplegando todo su armamento de rutinas cómicas en un duelo indoloro y sin palabras.