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Sin duda los aficionados al cine japonés saben que hoy sólo una porción mínima de las películas realizadas en Japón durante la época del silente sobrevive. En la estimación del famoso erudito Donald Richie (2001), el 90% de las películas realizadas antes de 1945 se ha perdido. Por lo tanto, cualquier película que haya sobrevivido de los primeros años del cine japonés es una delicia, sin importar cuál sea su calidad cinematográfica. "Shibukawa Bangoro" (Bangoro Shibukawa, 1922) no es la mejor de las películas silentes de jidai-geki que podemos ver, pero no obstante es muy interesante. Fue dirigida por Tsukiyama Kokichi, quien flmó 18 películas entre 1922 y 1925. Éste fue su debut, al menos según las fuentes de que disponemos.
La película tiene mucha acción. Hay todo tipo de peleas, desde judo hasta sumo. La narrativa es bastante difícil de seguir, pero las personas se mueven lo suficientemente rápido como para que la película mantenga un ritmo funcional. El papel principal de Bangoro lo interpreta Onoe Matsunosuke, una de las primeras estrellas de cine de Japón. Basándonos sólo en esta cinta, es difícil estimar su rango como actor, pero muy poco más sobrevive de sus actuaciones. Los personajes son unilaterales, como a menudo solían ser en las películas de época anteriores a la guerra. Bangoro es un buen luchador, pero tiene enemigos que traman contra él. Más tarde, en el segmento más memorable de la narración, tiene que luchar contra una bruja araña y eso es interesante. En otras ocasiones es difícil seguir lo que está sucediendo.
