1884

Corazón fiel


General

Titulo original: Coeur fidèle
Nacionalidad: Francia
Año de producción: 1923
Género: Drama

Otras personas

Director: Jean Epstein
Escritor: Jean Epstein; Marie Epstein
Productor/Estudio: Pathé Cinéma
Compositor:
Fotografia: Léon Donnot; Paul Guichard; Henri Stuckert

Funcionalidades

Duración: 87
Pistas de idioma: Muda
Idiomas de los subtítulos: Castellano
Modo de color: Blanco y negro
Fuente ripeo: HD
Soporte: DivX
Tipo archivo: AVI
Calidad imagen: Muy buena
Peso: 1,4 Gb

Reparto

  • Léon Mathot
  • Gina Manès
  • Edmond Van Daële
  • Claude Benedict
  • Madame Maufroy
  • Marie Epstein

Sinopsis

Marie, una huérfana adoptada por el dueño de un bar en el puerto de Marsella que la explota, quiere escapar de su trabajo y de su amante alcohólico, para irse con otro hombre, un trabajador de los puertos.

Comentarios

Jean Epstein (Varsovia, 1897 – París, 1953) fue un cineasta, teórico de cine, crítico literario y novelista francés. Se trasladó muy joven a Friburgo (Suiza) y posteriormente a Francia. Al mismo tiempo que estudiaba medicina en Universidad de Lyon, entró en contacto con las vanguardias artísticas del París de entreguerra y conoció a algunos de los más importantes directores de la primera vanguardia realista, como Louis Delluc, Marcel L’Herbier y Germaine Dulac.

Dentro de este ambiente artístico, Epstein comenzó a escribir sobre cine y se convirtió en uno de los primeros teóricos de este arte. A lo largo de su vida escribió más de once volúmenes e innumerables colaboraciones en revistas. "Lo que distingue al cine -escribió- es que a través de los cuerpos impresiona los pensamientos". Fundó la revista literaria "Promenois" y "Bonjour, cinema!", una de las primeras revistas dedicadas al cine de la historia. Autor de numerosos ensayos y de varias novelas que fueron apareciendo desde los años veinte, entró en contacto con miembros del movimiento surrealista como André Breton y, sobre todo, con Luis Buñuel, que trabajó como ayudante de dirección suyo en un buen número de películas, antes de debutar con "El perro andaluz" (1929).

Desde sus primeros trabajos se puso de manifiesto una tendencia presente en todo su cine y muy común entre los directores de vanguardia. Frente a películas convencionales, que dirigió dentro de la industria de la época, Epstein realizó otros filmes más personales y arriesgados, donde puso en escena todos sus postulados teóricos, que constituyen lo mejor de su obra. En ellos se manifiesta el verdadero Epstein.

(Eddie Constanti)
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En 1923, Jean Epstein tuvo su mayor éxito con "Coeur fidele", la expresión cinematográfica de sus teorías. Filmada en el paseo marítimo de Marsella, la película presenta un elenco de personajes descarados, coloridos cafés y muelles. La historia ofrece un triángulo romántico; sin embargo Epstein utilizó dispositivos innovadores como líneas de tiempo no secuenciales y secuencias de flashback. Epstein ató la cámara a un tiovivo en un punto determinado para proporcionar imágenes de giros y mareos cada vez mayores.

"Coeur fidele" es un romance contemporáneo cuya poesía de la costa combina un realismo sórdido con un lirismo visual deslumbrante: la película es una evidencia temprana de la preocupación de Jean Epstein por explorar las posibilidades expresivas del cine. En lugar de desarrollar la historia convencionalmente a través de confrontaciones dramáticas, Epstein enfatiza patrones simples de figuras retóricas y varias secuencias ambiguas de subjetividad privilegiada. Además, "Coeur fidele" hace uso de un primer plano asombroso y memorable de sus protagonistas mirando inquietantemente a través de una ventana. La cara de Gina Manes (mientras mira por la ventana sucia), es una imagen deslumbrante y hermosa que parece flotar sobre la narración misma, que flota sobre el agua del miserable y sombrío puerto. También cabe añadir la presencia secundaria pero muy importante de Marie Epstein, hermana del director, en su papel de vecina lisiada.

La secuencia del carrusel se ha convertido en un "clásico" aceptado del impresionismo cinematográfico, ya que muchos espectadores quedaron (y siguen) muy impresionados por esa sorprendente secuencia, en la que la heroína viaja en un estado de extrema agitación mental. Epstein, inspirado en "La roue" de Abel Gance, experimentó en esta escena con la edición de fragmentos de película muy cortos en patrones regulares y rítmicos. Esta sección de montaje rápido y movimiento de cámara fue llamada por Rene Clair "intoxicación visual".