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Ni más ni menos que uno de los repartos más populares (y caros) posibles, con casi todas las estrellas principales del momento.
Fue uno de los mayores éxitos del cine mudo español y quedó en la memoria del público, tanto que se hicieron versiones sonoras posteriores (la más celebrada, dirigida por Fernando Delgado en 1936).
Su duración, superior a las horas, era extraordinaria en el cine mudo español.
Cuando se estrenó, en 1926, no se hizo con música flamenca, sino con orquesta y, en muchos lugares, orquestina; pero sin cantaores ni tocaores.
La restauración de 1992, pagada por la expo de Sevilla, encargó la música a Enrique Morente, que compuso e interpretó dos piezas, completando la banda sonora con viejas grabaciones. No era muy ortodoxo, la verdad, pero... ¿qué es una película de toros sin pasodobles tocados por una banda? En TVE2 se pasó la primera versión de aquella restauración, pero la grabación no se conserva en los archivos de TVE ni tampoco la guarda la Filmoteca. Queda esta copia -la definitiva- sin músicas.
Se conservaba entera en el voltio de Filmoteca Española. Primero, en nitrato; después, pasada a contratipo safety. En los años 90 TVE emitió una versión, con virados y música flamenca muy discutibles. Posteriormente se efectuó esta cuidada restauración, con una limpieza de imagen y devolviendo los virados originales. Se estrenó con música interpretada por una orquestina, pero la música no se ha conservado.
Nunca se ha proyectado en TVE ni fuera de los circuitos de filmotecas ni tampoco se ha editado en vídeo, de modo que esta copia es toda una primicia.
