El flautista de Hamelin (Krysar)

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Sinopsis

Versión oscura del famoso cuento del flautista de Hamelin, de Robert Browning, que mezcla diferentes técnicas de animación, especialmente stop-motion (marionetas) y diferentes estilos que van desde el arte medieval al expresionismo alemán.

Salvo en contadas excepciones, los habitantes de Hamelin sólo piensan en una cosa: amasar fortunas dedicándose al comercio. En medio de tanta prosperidad las ratas se multiplican, pero nadie repara en ellas hasta que empiezan a peligrar los negocios. Es en este momento cuando un viajero llega a la ciudad. Se trata de un flautista que se ofrece a terminar con la plaga a cambio de la recompensa que se ofrece. Cumplido el trabajo, el flautista conoce a una bella joven que no comparte el espíritu ruin y avaricioso de sus conciudadanos. Cuando se dirige a cobrar su recompensa, el flautista es rechazado con burlas. Mientras, la joven es asaltada en su casa, forzada y asesinada. La venganza del flautista no se hará esperar.

Comentarios

La animación checa no deja de sorprenderme. Si "Alice" era una pasada, esta Krysar no sólo es mejor sino que encima está mucho más trabajada. Y parecía imposible. Mezclando algo del expresionismo alemán, mucha mala hostia y crítica social, esta macabra versión del Flautista de Hamelín es toda una muestra del talento que tiene esta gente, huyendo de los clásicos dibujos a mano para mostrarnos una animación stop-motion llena de detalles.

Todo lo que se ve en pantalla esté recreado con madera y animado de la forma que haría popular a Tim Burton y Henry Sellik, jugando con construcciones realmente magníficas y algunos trucos de cámara espectaculares. No sólo para la época, sino a día de hoy. La historia es la de siempre, así que no me pararé a explicarla. Simplemente destacar, sobre todas las cosas, el diseño de los personajes y la ambientación, la brutal BSO que suena de fondo, y secuencias como la cena, la aparición del flautista -toda su caracterización-, la escena de la "venganza" y especialmente una secuencia que me dejó flipado por el uso de la luz y las sombras y el juego que da todo esto en un marco como el que nos propone la cinta.

Si "Alice" era retorcida y era perfecta para acojonar a un crío, esta lo es incluso más. Sencillamente, una joya cuyos méritos artísticos están por encima de lo imaginable. Toda una cinta a reivindicar que, si bien no alcanza la maestría de "Pesadilla antes de Navidad" (la mejor de este tipo), merece totalmente la pena. Una pasada.