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Remake de un corto realizado en 1913, "El piloto joven" es una película visualmente muy hermosa (véanse, por ejemplo, esas escenas del caminillo que conduce a la enamorada de Akseli Rasi, el viejo y desengañado marino). Eino Kari, como director de fotografía, debió sentirse muy orgulloso de su primer trabajo.
La dirección de Erkki Karu es correcta, pero la trama decae poco a poco con esta tecnología temprana de hacer películas, a medida que las frases se alargan y las escenas permanecen vacías. Hoy en día, este melodrama parece demasiado ingenuo para ser tomado en serio y no puede competir con las posteriores obras vigorosas y personales de Valentin Vaala, que se produjeron una década más tarde. Otro punto negativo es la elección del personaje del pintor en un intérprete que se las da de jovenzuelo pero que luce una calva más que incipiente y un abdomen más que pronunciado, lo que hace que, inmediatamente, nos caiga rematadamente mal y nos pongamos de parte del torturado protagonista.
Con todo, los logros de Erkki Karu en "Nuori luotsi" no deben ser subestimados. Construyó la base para numerosas películas finlandesas posteriores.
(Eddie Constanti)
