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El más fuerte


General

Titulo original: Den stærkeste
Nacionalidad: Dinamarca
Año de producción: 1912
Género: Drama

Otras personas

Director: Eduard Schnedler-Sørensen
Escritor: Bernhard Holz; Alfred Kjerulf; Harriet Bloch
Productor/Estudio: Nordisk Films Kompagni
Compositor:
Fotografia: Louis Larsen

Funcionalidades

Duración: 31
Pistas de idioma: Muda
Idiomas de los subtítulos: Castellano
Modo de color: Blanco y negro
Fuente ripeo: Web
Soporte: x264
Tipo archivo: MKV
Calidad imagen: Excelente
Peso: 1,1 Gb

Reparto

  • Axel Boesen
  • Robert Dinesen
  • Else Frölich
  • Anton Gambetta Salmson
  • Alma Hinding
  • Carl Lauritzen
  • Aage Lorentzen
  • Axel Mattson
  • Alf Nielsen
  • Valdemar Psilander

Sinopsis

Una bella pero excéntrica condesa se divierte sometiendo a sus numerosos pretendientes a tontas pruebas. La mayoría de los hombres se convierten en perros enloquecidos en compañía de la condesa, pero hay uno que se comporta de manera diferente, bastante lasciva. A Chas Burns no se le da órdenes fácilmente y no dudará en hacer cualquier cosa para salirse con la suya. Ni siquiera cuando resulta que un viaje mortal sobre rieles es la única ruta directa al éxito y al astuto corazón de la condesa.

Con las películas Vanquished y The Modern Girl del mismo año, el director Eduard Schnedler-Sørensen creó un nuevo género cinematográfico: la comedia erótica. Ambas películas cuentan con el primer héroe de romance favorito de la época, Valdemar Psilander, en un papel protagónico, y en esta interpreta junto a Else Frölich, otra querida actriz de la década de 1910.

Comentarios

Dirigido por Eduard Schnedler-Sorensen, este corto de treinta minutos tiene virtudes suficientes para dedicarle media hora de atención. Está interpretado por el omnipresente Valdemar Psilander, que moriría cuatro años más tarde, según la versión oficial de un paro cardíaco, pero se rumorea que se trató de un suicidio. Tenía sólo 32 años y participó en cerca de noventa títulos

La trama gira en torno a una condesa bastante casquivana y un caballero de su entorno. Entre ambos, ninguno quiere dar el primer paso para declararse. Es más, la condesa se esfuerza en poner a prueba al caballero con retos cada vez más difíciles y también más absurdos. Una escenografía bien cuidada, con bastantes planos exteriores, resume la elegancia del estilo de Schnedler-Sorensen en su manera de entender el cine.

(Eddie Constanti)