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¿Es divertido este corto? Bueno, más que divertido es premonitorio. Si consideramos que, varios años después de que se filmara, el propio Arbuckle cayó en picado desde su alta posición de popularidad, el primer plano de un lloroso Roscoe en su celda de la cárcel, con que concluye esta película, es mucho más verídico de lo que podría parecer. El resultado de los juicios en se vio inmerso indica que Arbuckle no fue culpable de ningún delito, pero quedó arruinado y Hollywood nunca fue el mismo para él. Por supuesto, cuando se filmó este corto todo eso quedaba lejos en el futuro, pero es difícil no pensar en ello mientras uno lo ve. Ese primer plano anticipa una foto trucada e infame que apareció en los tabloides en el apogeo del escándalo de 1921, mostrando a Roscoe con cara sombría, supuestamente tras las rejas en San Francisco, enfrentándose a cargos de violación y homicidio involuntario. (Los cargos eran reales, de acuerdo, pero la foto fue falsificada.) Así que en principio "Fatty joins the force" es un corto cómico. Roscoe ejecuta un par de caídas divertidas y reacciona vigorosamente a un pastelazo en la cara, pero más allá de eso, dadas las connotaciones trágicas posteriores, esta película es tan cómica como "The Wrong Man", de Hitchcock.