3592

La alondra y el milano


General

Titulo original: L'enfant de Paris
Nacionalidad: Francia
Año de producción: 1913
Género: Melodrama

Otras personas

Director: Léonce Perret
Escritor: Léonce Perret
Productor/Estudio: Société des Etablissements L. Gaumont
Compositor:
Fotografia: Georges Specht

Funcionalidades

Duración: 123
Pistas de idioma: Muda
Idiomas de los subtítulos: Castellano
Modo de color: Blanco y negro
Fuente ripeo: DVD
Soporte: x264
Tipo archivo: MKV
Calidad imagen: Excelente
Peso: 3,7 Gb

Reparto

  • Suzanne Privat
  • Louis Leubas
  • Maurice Lagrenée
  • Émile Keppens
  • Marc Gérard
  • Henri Duval
  • Marie Dorly
  • Suzanne Le Bret
  • Jeanne Marie-Laurent
  • Adrien Petit
  • Léonce Perret

Sinopsis

Jacques de Valen, al morir su cuñada Laura y creyendo muerto a su hermano, el capitán de Valen, que se hallaba en la guerra, decide llevar a su sobrina a una escuela pensión, pues él también ha recibido órdenes de sus superiores de embarcarse seguidamente. Pero la pequeña no se encuentra a gusto en la pensión y una noche se fuga marchando a la aventura por la carretera. En dirección contraria avanza un vagabundo que se apodera de ella...

-------
Un padre que desaparece en la guerra, una madre que muere de dolor, una hija que es internada en un hospicio, un rapto... Con la mitad de estos ingredientes, Dickens hubiese creado uno de sus más sublimes relatos miserabilistas. Pero a Perret no le interesaba este rumbo, y a partir del segundo capítulo cambia el guión como por arte de magia y lo convierte en... un relato de intriga, un noir "avant la lettre", una historia de maldad y de recompensa. Y no creáis, en el film no faltan escenas vibrantes, sustos, persecuciones, chantajes y sorpresas, aunque por encima de todo destaca la técnica y el estilo de Perret: sobreimpresiones, planos en picado y contrapicado --¡esa escena de Pierre saludando al gentío desde el balcón!..., esos exteriores de París y Niza, esas callejuelas que "huelen" a humedad y pobreza, esos cuartuchos cochambrosos propios del lumpen más miserable. Y en contraste, la felicidad que irradian las secuencias familiares, los reencuentros, el final, que pese a ser feliz, Perret no deja que se le vaya de las manos y lo retrata de forma escueta y sin grandes grandilocuencias.

Ideada en formato de serial, pero con una continuidad sin pausa, esa "hija de París" es una muestra más del estilo perretiano: dulzura donde sólo existe amargura, elegancia incluso donde reina el caos, sincronía de la belleza con la fealdad. Hay que redescubrir a Perret y cuanto antes mejor. Hay que comprender cómo "inventó" cine y cuán poco se le tuvo en cuenta. Veamos esta película con recogimiento, pero también como la obra de un maestro. Veámosla, compañeros.

En el apartado de la interpretación, no dudo en destacar a "l'enfant", Suzanne Privat. Hoy, pocas criaturas podrían soportar un argumento en el que se las rapta y se las libera, se las sacude y se burlan de ellas, caen y se levantan, lloran y ríen, sufren y aman como esa niña prodigiosa que da mil vueltas a todas las Shirley Temple venideras. Su trabajo es natural y emotivo; nos hace humedecer los ojos en más de una escena. Y luego el "malo", ese Louis Leubas a quien ya vimos en "Tih Min", en "Vendémiaire" y en tantas otras películas de la época. Habrá quien diga que con esa cara, lo más normal es hacer de malo, pero incluso los villanos de las historias han de tener categoría, y Leubas la tiene: le odias a modo y cuando al final muere o cae preso, desearías poder dispararle el tiro de gracia tú mismo (algo que no pasaba, por ejemplo, con Lon Chaney, que por más pérfido que fuese, siempre despertaba nuestro lado más paternal... o maternal --táchese lo que no proceda).

Comentarios

¡Pobrecita Marie-Louise ( Frau Suzanne le Bret )!; nuestra pequeña heroína vive en la ciudad de París formando parte de una feliz y burguesa familia pero debido a ciertos avatares del destino, su amado padre, Herr Pierre de Valen ( Herr Émile Keppens ) tendrá que dejar su hogar para guerrear contra exóticos enemigos los cuales se hallan más allá de las fronteras galas.

Como en aquellos tiempos las comunicaciones eran muy lentas y no estaban lo suficientemente avanzadas ( habría que esperar aún unos años antes de la llegada de las palomas mensajeras ), al padre de Marie-Louise lo dan por muerto, un hecho éste que sume a la madre de nuestra heroína en una profunda tristeza, muriendo a los pocos días, quedándose así sola y huérfana la pobrecita Marie-Louise y por dicho motivo es enviada a un estricto internado para señoritas.

Debido a su condición de afrancesada, a la pequeña Marie-Louise no le gusta nada la disciplina y por dicho motivo decide escaparse del internado al caer la noche; pero ésta decisión tendrá terribles consecuencias para nuestra pequeña heroína pues ésta será encontrada por un delincuente conocido como “El Graduado” ( Herr Louis Leudas ) el cual deja a la niña a cargo de un zapatero borracho y su joven ayudante, Bosco ( Herr Maurice Lagrenée ) convirtiéndose éste último en el ángel de la guarda de la pobre pequeña.

Inesperadamente, sorprendentes noticias llegan a Francia: ¡el padre de Marie-Louise ha sido hallado con vida después de tantos años!; tras recibir el susodicho los preceptivos honores militares y tras tener conocimiento del trágico destino de su pequeña durante su larga ausencia, decide de inmediato encontrar a su hija.
El Graduado se aprovecha del padre de Marie-Louise, extorsionándolo pidiéndole una gran suma de dinero si quiere recuperar a su hija, a lo cual accede sin saber que será vilmente engañado, huyendo finalmente el Graduado a Niza con el dinero y la desdichada pequeña.

Pero Herr Pierre de Valen contará con la inestimable ayuda de Bosco en la búsqueda de su querida hija, una misión ésta que ciertamente no será nada fácil…

El filme “L’Enfant De Paris” (1913) de Herr Léonce Perret es un sorprendente filme en donde se pueden encontrar todas las tempranas virtudes y habilidades artísticas del director galo en todo su esplendor, una obra ejemplar repleta de imaginativos recursos y técnicas narrativas que ciertamente eran precursoras en dicha época.

El filme está ciertamente influenciado por lo que los franceses denominan “Roman Feuilleton”, o “folletín” en Hispania, esos relatos por entregas que se publicaban en los periódicos afrancesados durante el siglo XIX y que tan populares fueron entre los lectores plebeyos.

Habitualmente en las historias de esos folletines se hallaban involucrados personajes pertenecientes tanto a las clases altas como a las clases bajas, seriales en donde los contrastes sociales y la lucha de clases eran un recurso literario bastante habitual, siendo desarrollados éstos dependiendo de la ambición literaria de su autor conjuntamente con el necesario dramatismo de sus tramas.

“L’Enfant De Paris” reúne todas esas características que Herr Perret usa de una forma exquisita, explorando todas las posibilidades que historias tan convencionales como esas pueden ofrecer para su traslación al cinematógrafo.

Las penas y desgracias que padece nuestra pequeña heroína se van mostrando en detalle a lo largo de las dos horas de duración del filme ( una duración nada convencional para las producciones de la época ), desde su época feliz y burguesa al lado de sus progenitores, hasta los bajos fondos, un sorprendente contraste que es mostrado en todo su dramatismo por Herr Perret, especialmente el que acontece en los barrios bajos de la gran ciudad, dando lugar a una especie de realismo social que se entremezcla con reflejos de una sociedad en crisis ( pobreza, alcoholismo en contrapunto con el éxito tanto económico y social ), controvertidas realidades sociales que otorgan al filme una perfecta atmósfera para el desarrollo del melodrama como todo buen folletín que se precie debe tener, evitando Herr Perret el excesivo sentimentalismo y potenciando la emoción y la aventura, manteniendo un ajustado ritmo narrativo hasta que finalmente nuestra pequeña protagonista se reúne definitivamente con su amado padre.

Cómo éste Herr Graf ha mencionado anteriormente, los peligros que corre Marie-Louise son mostrados de una forma ciertamente muy imaginativa dentro de la estructura narrativa del filme, ideando Herr Perret increíbles planos y cuidados decorados, todo ello para potenciar y lograr finalmente todo un clásico melodrama digno del mejor y ejemplarizante folletín.