Sinopsis
Gracias a un decreto de la emperatriz Catalina II sobre delimitación de territorios, el conde Orlov toma posesión de unas tierras que hasta entonces pertenecían al hacendado Pyotr Grinev. Mientras se plantea adquirir nuevas tierras en Orenburgo, Grinev comunica a su hijo adolescente Petrusha que va a enviarlo al ejército. De este modo, y acompañado del sirviente Savelich, el joven Petrusha se dirige en un carruaje a la fortaleza de Belogorsk. El destino quiere que durante el viaje, un vagabundo se cruce en el camino de Petrusha. Bajo una terrible tormenta de nieve, el vagabundo ayuda a los viajeros a llegar a la fortaleza. Petrusha recompensa generosamente al vagabundo con un abrigo de pieles, pese a que su padre no le ha entregado demasiado dinero. En realidad, el vagabundo resulta ser Emelyan Pugachov, un caudillo cosaco desconocido por entonces para todos.