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Dziga Vertov fue sin duda uno de los directores de cine más importantes de la historia de la URSS, un director innovador, documentalista y teórico del cine que usó la cinematografía como el vehículo perfecto para sus esfuerzos artísticos, logros que no siempre comprendieron o compartieron en su totalidad sus colegas o las autoridades soviéticas. El estilo cinematográfico de Dziga Vertov, "Cine-ojo", refleja a la perfección las inquietudes artísticas que tenía este director ruso a mediados de los años veinte, con películas en las que el uso de la edición es fundamental para plasmar en imágenes las teorías cinematográficas de Vertov sobre la cámara capturando la realidad. Sin embargo, esto es algo así como una contradicción porque la edición es, en cierto modo, la manipulación de la realidad.
"Shestaya chast mira" fue un encargo de la Gostorg, una agencia del gobierno ruso. No en vano la película es un himno a las poderosas posibilidades de la USRR, un gran país compuesto por una enorme diversidad de personas, razas y nacionalidades, propietarios de la sexta parte del mundo, que pondrán sus esfuerzos al servicio de su pueblo para convertirlo en una potencia mundial. Vertov nos muestra muchas secuencias industriales, la exportación de bienes soviéticos y un estudio etnográfico detallado de los diversos pueblos que componen la Unión Soviética. Es una propaganda magistral.
El uso de la edición es ciertamente asombroso y obviamente fundamental para este tipo de imagen, en la que diferentes planos y secuencias se funden para transmitir un mensaje político y un estudio artístico, incluyendo fascinantes ángulos de cámara y técnicas cinematográficas como pantallas divididas, animación y la cámara itinerante. Todo esto crea un fascinante collage, tan fascinante como la extinta USRR en sí misma.
(Ferdinand von Galitzien)
