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Este cortometraje documental es la primera película de George Lacombe, un sólido director firmante de varios famosos "polars" durante la Ocupación (Le dernier des six, Monsieur La Souris), pudiendo destacarse posteriormente ese Martin Roumagnac con la pareja (también en la vida real) formada por Marlene Dietrich y Jean Gabin, actor que también protagonizó la interesante Leur dernière nuit. Trabajó asímismo con Brigitte Bardot en la destacable La lumiére d'en face.
A los que han ido a París y volverían cada fin de semana, a los enamorados, a los soñadores, a los que viven del recuerdo, a los mitómanos, a los amantes de la belleza, a los que apellidos como Piaf, Chevalier, Trenet o Gabin les ponen la piel de gallina, a todos vosotros y a cuantos se quieran apuntar, os traemos dos vívidas estampas de la ciudad-luz, dos retazos de historia que un día fue, dos maravillas en forma de mediometraje --una de ficción, la otra de cinéma vérité avant la lettre (es decir, antes que Truffaut, Godard y compañía acuñaran la expresión--), ambas filmadas a finales de los años veinte
Los chatarreros en la madrugada parisina, buscando los restos que descarta la sociedad; unas parejitas solazándose en domingo (porque en cuestión de amor, nadie tiene nada que contarles a nuestros abuelos); enclaves; edificios; escalinatas; fuentes; una famosa tour construida con metal y tornillos; el Sena y sus decenas de puentes; el Moulin Rouge; el Folies; notas de acordeón; tranvías; Pigalle; el Louvre; el Bois de Boulogne; gente que viene y va en pos de sus vivencias personales... ¡París!