Comentarios
Sólo se han conservado dos películas más de la época anterior a Terje Vigen, a menudo denominada los años de aprendizaje de Sjöström. Pero se podría argumentar que la razón del gran éxito de este última se debió más a los cambios en la política de producción y en la actitud del público que a que se tratara de una obra plenamente madura. En cualquier caso, Havsgamar (Los buitres del mar) y Dödskyssen (El beso de la muerte), ambas de 1916, fueron producidas en un momento en el que el sensacionalismo y el melodrama aún dominaban la cinematografía sueca. Havsgamar se basaba en una novela de Emilie Flygare-Carlén titulada Rosen från Tistelön (La rosa de Tistelön), que tanto Mauritz Stiller como Georg af Klecker habían adaptado con anterioridad, aunque, desgraciadamente, ninguna de estas películas se conserva. La novela trata del contrabando localizado en una archipélago. Como hará más tarde en Terje Vigen, Sjöström rodó la película en la isla de Landsort. La naturaleza juega un papel central en el desarrollo narrativo. Sjöström experimenta con la forma de una manera que nos recuerda a numerosas películas francesas y danesas de la época, como por ejemplo, en una escena clave en la que emplea la pantalla dividida mostrando dos habitaciones diferentes.
