Comentarios
Me siento rejuvenecer fue un producto fresco e innovador en su época. Posteriormente se ha utilizado muchísimo el tema de científicos que experimentas con fórmulas que harán un mundo mejor y principalmente en encontrar el elixir de la eterna juventud.
Partiendo de esta idea el genial director de westerns y no menos cuando cambia de género Howard Hawks, nos introduce en la vida del matrimonio formado por Cary Grant y Ginger Rogers. Dos personas serias, responsables y muy educadas las cuales verán alterados sus respectivas formas de actuar debido a un experimento llevado a cabo por el primero. Científico de profesión, Grant intenta dar con una fórmula pedida expresamente por el dueño de los laboratorios en los cuales trabaja y que cada vez está más convencido que ese sueño podrá llevarse a cabo, única y exclusivamente con la colaboración de este.
El comienzo reconozco que no era muy esperanzador teniendo en cuenta que se trata de una comedia, pero a raíz del descubrimiento de la fórmula de la eterna juventud y las diferentes pruebas que se llevan a cabo sobre primeramente el mismo científico y a posteriori con su esposa nos mostrará una serie de acontecimientos y locuras a la cual más ridícula y divertida.
A muchos que la han visto les parece una película tremendamente infantil, sin embargo ahí es donde reside la gracia, en ver a esa pareja tan perfecta hacer el ridículo escena tras escena. Destacar también el corto papel de Ginger Rogers como bailarina en esta película, y ver de nuevo a una espectacular Marilyn Monroe.