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RESTAURACIÓN 2013.
Música de Bernd Schultheis en la edición restaurada de 2013. La música original fue compuesta por Giuseppe Becce.
Gerhard Lamprecht hizo una obra maestra de esta película. Aún siendo la mejor, no está sola. Forma parte de una original trilogía, junto con Die Verrufenen (1925) y Die Unehelichen (1926), donde se explora las relaciones entre las diferentes clases sociales y sus éxitos o fracasos, del Berlín de los años veinte. Fue proclamada una de las mejores películas del año en que se estrenó
Al ver esta película por primera vez lo que más sorprende es la claridad con la que están definidos los personajes. En parte, esta sensación proviene de la estrecha colaboración que Lamprecht estableció con un genio caricaturista de la época, Heinrich Zille, capaz de resumir en escasos, pero determinantes detalles, el carácter de las personas, y reflejó todas estas enseñanzas en sus guiones.
Dos detalles más: la soberbia interpretacion de Aud Egede-Nissen, en el papel de joven esposa encarcelada, capaz de transmitir con sus gestos lo más intimo del sentimiento humano con una facilidad pasmosa... un auténtico lujo para la vista, y la inesperada y acertadísimamente envolvente banda sonora que para esta restauración realizó el compositor alemán contemporáneo Bernd Schultheis, utilizando un lenguaje musical fuera de cualquier convención... un auténtico lujo para los oídos.
Decepciones, amor, engaños, felicidad... todos estos elementos están presentes en los personajes, pero cada uno viviéndolos de manera diferente. Y al cohabitar, inevitablemente compartirán sentimientos. Creo que el éxito de Lamprecht consiste precisamente en que respetando, en general, la simultaneidad de la acción, consigue extrapolar de manera convincente, los conflictos que se presentan en la vida en sociedad a un microcosmos particular de forma que cualquiera de nosotros podría verse reconocido dentro del espacio de un pequeño edificio de una calle alemana.