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Ripeada por Arupa a partir de un mp4 de 3,6 GiB bajado de la Cinemateca Portuguesa.
"Mulheres da Beira" ha sido restaurada recientemente en su versión completa y tiene los tintados originales.
Rodada en escenarios naturales del Norte de Portugal, lugares que Lupo conocía bien, y que dotaban de carácter a sus películas lusitanas. En concreto, la cascada de la Flecha de Mizarela, donde culminan el despliegue escenográfico espectacular que ha tenido lugar donde todo el metraje y el calvario de Anninhas, me ha recordado muchísimo a la situación análoga planteada en La Dolorosa, de Gremillon, en los despeñaderos de Albarracín.
Dirigida por Rino Lupo, relata la historia de una joven, Anna, que para ganar unas monedas se traslada desde su modesta casa hasta el pueblo vecino para vender el pan que elabora su padre. Allí, en el pueblo, no tarda en conocer a un rico hidalgo quien, desde el primer momento que la ve, se propone que tiene que ser suya. Anna no tarda mucho en ceder y abandonar a su padre, deslumbrada por la promesa de vivir como una gran señora en la mansión que tiene el hidalgo en Oporto. Atrás deja a un pobre pastor que bebía los vientos por ella.
La felicidad de Anna dura muy poco y el hidalgo se encapricha de una joven de la buena sociedad pero que resulta ser harto desvergonzada, ya que se ofrece de buenas a primeras al mozo y la pobre panadera tiene que marchar del lugar, aunque ya no lo hace sola, puesto que en sus entrañas vive... ¿adivináis qué? De aquí hasta el final, el filme se convierte en la trayectoria de una expiación que en algunos momentos toma, casi, la apariencia de un modesto coro griego, siguiendo a la protagonista en sus cuitas. El colofón es trágico pero al mismo tiempo de una belleza solemne.
Lupo aprovecha los escenarios naturales de la historia y especialmente las tomas de los paisajes montañosos están muy bien resueltos. La visión de la vida cotidiana de la gente retratada es interesante y nos ilustra del quehacer y vivencias de un pueblo portugués en aquella época, de los chismorreos y de la dictadura de unos personajes odiosos llamados hidalgos, que hacían y deshacían a su antojo.
Bella película, que la Cinemateca Portuguesa ha querido rescatar del olvido y que ahora podemos paladear para ahondar un poco más en estas cinematografías casi olvidadas.
O acompanhamento musical de MULHERES DA BEIRA foi composto e interpretado ao piano por Nicholas McNair. As sessões de gravação tiveram lugar em 16 e 17 de outubro de 2016, no auditório da Escola Superior de Música de Lisboa, sob a direção de João Ludovice.
