1966

Oliver Twist


General

Titulo original: Oliver Twist
Nacionalidad: Estados Unidos
Año de producción: 1922
Género: Drama

Otras personas

Director: Frank Lloyd
Escritor: Frank Lloyd; Harry Weil; Charles Dickens
Productor/Estudio: Associated First National Pictures; Jackie Coogan Productions
Compositor: John Muri
Fotografia: Glen MacWilliams; Robert Martin

Funcionalidades

Duración: 74
Pistas de idioma: Muda
Idiomas de los subtítulos: Castellano
Modo de color: Blanco y negro
Fuente ripeo: DVD
Soporte: DivX
Tipo archivo: MKV
Calidad imagen: Buena
Peso: 700 Mb

Reparto

  • Jackie Coogan
  • James A. Marcus
  • Aggie Herring
  • Nelson McDowell
  • Lewis Sargent
  • Joan Standing
  • Carl Stockdale
  • Edouard Trebaol
  • Lon Chaney
  • Taylor Graves
  • George Siegmann
  • Gladys Brockwell
  • Lionel Belmore
  • Florence Hale

Sinopsis

La madre de Oliver muere al nacer su hijo sin dejar señas de quién es ella y quién pudo ser el padre del recién nacido. Oliver es internado en un hospicio y tras diversas peripecias escapa camino a Londres, donde entrará en contacto con una banda de carteristas callejeros comandada por Fagin, un personaje poco escrupuloso que se mueve entre el hampa de los suburbios.

Comentarios

Pocos habrán que no conozcan la historia de Oliver Twist, tantas veces llevada a la pantalla y a los escenarios. Ésta, dirigida por Frank Lloyd, bien pudiera ser la más fidedigna a la novela de Dickens. Al menos así lo acreditan diversos historiadores de la obra del renombrado inglés. En principio, se trataba de profundizar en el filón que significaba Jackie Coogan en esa época, tras su rotundo éxito en "El chico", de Chaplin. Pero Lloyd no se dejó seducir por los deseos de la productora y terminó desarrollando un filme donde todos los personajes tienen la importancia que merecen y particularmente Oliver no destaca en este sentido.

Los ambientes del lumpen londinense son magníficos, no simples decorados, y muchas de las escenas están filmadas en plena calle. La puesta en escena es ágil y se huye del fácil sentimentalismo para ofrecer la cara más amarga del relato, algo con lo que Dickens hubiese estado de acuerdo, si leemos su propia introducción a la película. En el apartado interpretativo todo el mundo cumple y transpira, con su físico, un halo de autenticidad. Por supuesto, Fagin no podía ser otro que Chaney, un Fagin a miles de años luz del creado por Ron Moody en el musical "Oliver!", muchos años después: Chaney es un viejo encorvado, de aspecto miserable, calculador, traicionero y con instintos verdaderamente criminales, que sólo siente miedo ante el malvado Bill Sykes. A uno, por simple mimetismo, le duele la espina dorsal cuando piensa en las horas en que Chaney tuvo que andar agachado durante el rodaje.

Película que no se hace monótona, por mucho que sepamos la historia de memoria, tiene un sorprendente final pero que es acorde con los deseos del propio Oliver, desconocedor de su identidad. Coogan queda de pie, frente a la cámara, con los brazos en jarras, muy satisfecho, y el intertítulo indica: "¡Su nombre era Oliver Leeford!".