Comentarios
Una breve versión bufa de la obra de Shakespeare, ambientada en una aldea tirolesa y en paisajes nevados, con familias enfrentadas, los Capulethofers y los Montekugerls. Todos los personajes son contemplados con extrema comicidad, especialmente los ridículos padres, siempre a la greña. Las bolas de nieve y los bastonazos abundan y el personaje del juez tiene connotaciones irresistiblemente jocosas. El baile de disfraces es divertido en extremo, con el primo Tübalder con armadura y un absurdo casco alado, y el pretendiente "oficial" escogido por los padres con una peluca rizada amarilla y alas de ángel. En ese mismo baile aparecen cinco o seis disfraces con enormes cabezas de papel maché, que pudo haber firmado sin ningún rubor nuestra Joan Brossa.
Fantasía enloquecido de la mente innovadora de Lubitsch, que no sólo destripaba a su gusto a los mitos intocables de la literatura clásica, sino que aportaba su propio toque personal para enriquecer la trama. Un mediometraje que nos ofrece cuarenta y seis minutos de inteligente diversión.