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Fue la mayor de las tres hermanas (1894-1957). Como ya os dijimos, su padre, desempleado alcohólico, las abandonó un día de Navidad.
Norma empezó pronto a trabajar como modelo y gracias a ello se le abrieron las puertas del cine, en principio como figurante en pequeños papeles. En 1916 se casó con Joseph Sckenck, más tarde directivo de la Fox, y a partir de entonces éste, con la ayuda de la madre de Norma, condujeron meticulosamente la carrera de la actriz, que no tardó en brillar con luz propia, convirtiéndose en una de las figuras más importantes de la pantalla y formando su propia productora. Ese control ejercido por Schenck lo retomó la misma Norma para introducir a su hermana Constance en el mundo del cine (el contrato entre Griffith y Constance para interpretar "The fall of Babylon", lo tramitó Norma).
Con la llegada del sonoro, la voz de Norma no convenció al público, como sucedió con tantas otras figuras famosas, y actuó por última vez en 1930. Luego, su segundo marido (George Jessel), trató de introducirla en la radio, pero allí Norma tampoco tuvo fortuna e incluso su matrimonio fracasó. Murió de una neumonía, derivada de una gripe, a los sesenta y tres años.
Hoy os traemos "The social secretary", del mismo año en que Norma se casó con Schenck. Es una comedia ligera sobre los usos y costumbres de la época, donde ya existía el acoso laboral y los jefazos de las empresas tenían manos de pulpo y dirigían sus miradas hacia el trocito de pierna que dejaban entrever las enaguas y refajos de sus secretarias. Por esa misma razón, Mayme (Norma) tiene que disfrazarse de adefesio para encontrar un trabajo donde no la estén pellizcando en todo momento. Así, escondiendo sus gracias naturales, logra entrar en la mansión de una dama muy rica en calidad de secretaria y consejera particular. Pero esa dama tiene un hijo...
Película sin complicaciones argumentales, con un pelín de intriga y agradable de ver, que la buena gestión de la Talmadge resuelve sin ninguna dificultad. La dirige John Emerson, artífice de varios de los mejores títulos de Fairbanks. En el reparto figura como secundario el genial y "odioso" Erich von Stroheim. La copia está algo desvaída, pero es aceptable. Ojalá os haga pasar un buen rato.
