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The Extra-Quick Lunch


General

Titulo original: The Extra-Quick Lunch
Nacionalidad: Estados Unidos
Año de producción: 1918
Género: Animación

Otras personas

Director: Charles R. Bowers; Bud Fisher
Escritor: Bud Fisher
Productor/Estudio: Bud Fisher Film Corporation
Compositor:
Fotografia:

Funcionalidades

Duración: 6
Pistas de idioma: Muda
Idiomas de los subtítulos: Castellano
Modo de color: Blanco y negro
Fuente ripeo: BD
Soporte: x264
Tipo archivo: MKV
Calidad imagen: Excelente
Peso: 425 Mb

Sinopsis

Un cliente llega a un restaurante en el que Mutt es el camarero y Jeff el cocinero. El cliente pide una sopa de rabo de buey y después discute con Mutt porque la sopa no contiene rabo de verdad. Después Mutt atiende con algunas dificultades a otros dos clientes y a una atractiva mujer.

Comentarios

Aunque en general es algo simple, este corto de Charley Bowers de la serie Mutt y Jeff tiene una serie de características interesantes. Bowers y Bud Fisher trabajaron juntos en una gran cantidad de funciones animadas de esta serie, pero por desgracia casi no queda nada de ellas, lo que hace que ésta sea una rara oportunidad de ver cómo eran esos cortos. También hay al menos un par de buenos gags en éste que son interesantes como anticipo del material contenido en algunas de las películas posteriores de Bowers.

Toda la acción tiene lugar en un restaurante en el que Jeff es el cocinero y Mutt el camarero, y no pasa mucho tiempo antes de que las cosas se salgan de control. Algunas de las payasadas animadas son simples rutinas cómicas, pero destacan un par de cosas. Dos buenos gags involucran el tipo de artilugios que Bowers usó más tarde con gran efecto en algunas de sus propias películas, y en particular hay uno que usó de una forma más elaborada en "He done his best " (también en este ciclo). El gag con los panqueques de la mujer también es interesante porque muestra, de una manera más simple, el tipo de transformación inesperada que Bowers perfeccionaría más tarde y aplicaría como parte de algunos de sus mejores efectos visuales.

Todas estas características hacen que valga la pena ver esta pequeña película, aunque no tenga nada excepcional, al menos para aquellos que disfrutan de las características maravillosamente inventivas posteriores de Bowers.