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Como sucede con otro largometraje de Micheaux, "Within Our Gates", la narrativa divaga y está repleta de demasiados personajes para causar una impresión definitiva. Los temas centrales tratan sobre una mujer negra que intenta encontrar un lugar para ella en un mundo hostil, y un hombre birracial que guarda resentimiento contra su propia raza por supuestamente obstaculizar su progreso en la sociedad (un flashback muestra por qué: la madre de Driscoll, sin saberlo, interfiere en sus intentos de cortejar a una chica blanca y él reacciona lanzándola al suelo). Son temas interesantes, pero desafortunadamente la narración se hunde en medio de una trama bastante insulsa con los villanos. Y cuando llega el clímax, es demasiado tarde para animar las cosas. También hay muy poca definición de los personajes; de hecho, aquí nadie parece más que un tipo de personaje.
La actuación es adecuada en su mayor parte, pero como hay tantos personajes de los que hacer un seguimiento, no podemos decir que nos parezca que alguna de las actuaciones destacase. Hay algo de comportamiento melodramático al principio y, como resultado, algunas de las escenas son involuntariamente divertidas. Iris Hall está encantadora como la heroína, pero no tiene suficiente tiempo en pantalla para hacer mucho más con su papel. Chenault es un poco ambiguo, pero sobre todo efectivo como el villano Driscoll.
