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Durante el verano de 2012, el descubrimiento de una copia incompleta (3 de las 6 bobinas sobreviven) de "La sombra blanca" (1924) de herr Graham Cutts en el "New Zealand Film Archive", originó un gran revuelo en todo el mundo (bueno, tal vez no fuese un GRAN escándalo, ya que es bien sabido que a los condes alemanes nos gusta exagerar los hechos por el bien de las películas mudas). La emoción no fue por el hecho de que se encontrara otro silente "perdido" o que estuviese dirigido por herr Cutts -¡nein! El escándalo lo causó que herr Alfred Hitchcock colaboró en esta película como asistente de dirección, editor, director de arte y guionista. Tanto ruido puede ser perdonado por este conde alemán excepto por el error cometido por algunos en los medios de comunicación de pelo largo (que antes no prestaban atención al cine mudo) que otorgaron la autoría de la película por completo a herr Hitchcock, ignorando a herr Cutts, un importante director británico durante la era silente y que fue el principal responsable de la película.
"The White Shadow" es, sin duda, una película sólida y muy interesante en sí misma, independientemente de la participación de Hitchcock en ella. Cuenta la historia de las hermanas gemelas (ambas interpretadas por frau Betty Compson), dos almas de personajes muy diferentes que comparten el mismo amante, pero terminan con destinos distintos. Las dos hermanas son un estudio de contrastes: frau Georgina es una fraulein responsable que se queda en casa con sus padres en su finca, mientras que frau Nancy es una chica salvaje que se escapa de casa a París, donde fuma mucho y juega a las cartas en un cabaret, "El gato que ríe" (parece que hay muchos animales misericordiosos en Francia). También aparece un estadounidense, herr Robin Field (Clive Brook) que conoce y se enamora de Nancy en un barco cuando ambos regresan a Inglaterra, aunque luego cambia su afecto por Georgina (sin saber quién es ella en realidad).
Hay que decir que el drama y la atmósfera de la película son ciertamente notables y que frau Compson se muestra excelente en su doble papel. La cuidadosa dirección de arte también es digna de mención (sí, aquí herr Hitchcock hace un buen trabajo) y herr Cutts logra un intenso efecto dramático y también agrega una dosis de moralina. La autoría de la película pertenece claramente a herr Cutts pero si uno divaga un momento e insiste en encontrar algún rastro de Hitchcock en el trabajo general, existe cierto paralelismo entre la personificación en esta película y la posterior "Vértigo", pero esto puede ser sólo la fantasía de un viejo conde alemán.
(Ferdinand von Galitzien)
