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Oliver Hardy tiene el papel pesado en este corto cómico protagonizado por Larry Semon, quien fue más famoso por hacer posiblemente la peor película muda de todos los tiempos, "El mago de Oz", de 1925. "The rent collector", afortunadamente, es mucho mejor. Tonto de mí, pensé que era el cortometraje más divertido del programa "Laurel o Hardy" del Festival de Pordenone. Además de la comedia que a veces también conduce a la risa, se agradece que, a diferencia del largometraje posterior de Semon, no nos arroje vómito de pato (una referencia a un pato vomitando sobre Semon en dicha película) siempre dentro de un libro infantil clásico y en un supuesto humor sobre los estereotipos raciales crueles (aunque eso puede deberse a que en este corto todo el elenco es casi tan blanco como el maquillaje grotesco de Semon).
El gag de la mujer cayendo en un bache después de que Semon ponga su chaqueta encima es divertido, con él y el policía ignorando que ella se ahoga para comenzar una persecución. Hay una buena explotación de los gags más adelante, con un par de chistes relacionados con cuchillos que son obvios, mientras que los que incluyen coches lo son menos. Los gags, en general, tienden a ser bastante elaborados y no tan amplios como en otros cortos cómicos, aunque la violencia sigue siendo del nivel de los dibujos animados, y al final todo se convierte en un juego sin sentido. Y no tengo idea de por qué hay una peluquería debajo de un desagüe de la calle. ¿El lugar se inunda cada vez que llueve? Pero entonces se nos plantea la pregunta de por qué Hardy quiere que un barbero se afeite la barba pintada. Aquí la lógica no sirve para nada.
