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Publicada por Arupa/Caolin en CF-CL otra copia x264 y de peor calidad.
Ésta es una película muy tonta, pero hasta donde yo sé, es la única versión cinematográfica disponible de la apasionante novela "Tres semanas", de Elinor Glyn, de 1907. Hubo una versión estadounidense en 1914 y habría otra en 1924 (que supuestamente existe pero que no he visto). Entre las dos, Márton Garas (también director de una versión de 1918 de Anna Karenina), produjo esta versión húngara (publicada en alemán con el título de "Selige Drei Wochen"). Glyn, más tarde célebre como la inventora del "it" y la persona que enseñó a EE. UU. todo lo que querían saber sobre el sexo y no se atrevían a preguntar, era un especialista en romances dirigidos a dependientas.
Ésta es una fantasía femenina perfecta (o mejor, una pesadilla para un hombre), sobre una princesa rusa casada con un marido brutal a quien no ama y que con la ayuda de los sirvientes (son lo mejor de la película), aprovecha la ausencia de su esposo en misión diplomática, para huir de casa, instalarse de incógnito en un hotel y seducir a un joven conde sensiblero llamado Iván. Y sí, uno llega a ver la famosa piel de tigre (aunque, francamente, no mucho en la forma de pecar). La historia (es su gracia salvadora) no pretende tratar nada más que sexo casual (y un poco de comida y bebida igualmente casual). La pareja sólo tiene tres semanas para estar junta antes del regreso del bruto y el pecado, aunque no lo veamos, evidentemente tiene lugar durante este breve idilio porque tres años después la princesa, ahora de regreso con el bruto, tiene un hijo de pelo dorado de tres años. Desafortunadamente, la pareja sigue sin llevarse bien y ella le envía una carta. No diré más para no hacer spoilers.