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Wall Street Blues


General

Titulo original: Wall Street Blues
Nacionalidad: Estados Unidos
Año de producción: 1924
Género: Comedia

Otras personas

Director: Lord, Del
Escritor: Pinto Colvig; John A. Waldron
Productor/Estudio: Mack Sennett Comedies
Compositor:
Fotografia: George Spear

Funcionalidades

Duración: 18
Pistas de idioma: Muda
Idiomas de los subtítulos: Castellano
Modo de color: Blanco y negro
Fuente ripeo: Web
Soporte: x264
Tipo archivo: MKV
Calidad imagen: Regular
Peso: 160 Mb

Reparto

  • Sidney Smith
  • Billy Bevan
  • Andy Clyde
  • Natalie Kingston
  • Barbara Pierce
  • John J. Richardson
  • Vernon Dent
  • Edgar Kennedy
  • Sunshine Hart
  • Leo Sulky

Sinopsis

Billy Bevan es el conserje y el cuidador general de la empresa bursátil de Andy Clyde, donde todos están enamorados de la hija del jefe, Natalie Kingston. El usurero John A. Richardson quiere arruinar a Clyde para poder obligarlo a que Natalie se case con él.

Comentarios

William Bevan Harrys (nombre verdadero), nació en Australia y, como su colega Snub Pollard, se afincó en Estados Unidos, donde interpretó pequeños papeles en algunos cortos, hasta que Sennett lo descubrió, dándole el protagonismo en sus películas.

Intervino en cerca de 250 títulos, algunos ya en la etapa sonora. Su personaje solía ser el de un tipo frescales que sorteaba con facilidad los problemas que iban surgiendo a su paso. Usaba un enorme mostacho y durante un tiempo formó pareja con Andy Clyde, otro rostro habitual en el slapstick. Murió en 1957, justo cuando las nuevas generaciones empezaban a conocerlo, a través de las compilaciones de cine cómico de Robert Youngson.

(Eddie Constanti)

La película

Es más o menos una comedia de fregadero de cocina, en la que el personal de Sennett redactó el guión, añadió algunos gags, luego hizo que Edgar Kennedy intentase un robo... y aún no tenían ni un rollo de material, así que tuvieron que agregar todo tipo de tramas secundarias y gags, incluidas dos secuencias emocionantes: Andy colgando de una cuerda por la ventana y luego siendo estrangulado por otra cuerda atada a un automóvil que colgaba de ese acantilado en la costa donde les gustaba tirarlos a todos. Además de una persecución con coches, un atrevido rescate en un avión... fuese lo que fuese, lo agregaron. Al final tuvieron las dos bobinas y las mandaron para su estreno, pero aunque hay muchos gags que están bien ejecutados, lo malo es que tal mezcolanza nunca resulta recomendable. Excepto por la señorita Kingston, que es preciosa.